Hoy me gustaría hablarte de la intimidad en la pareja. En muchas ocasiones a la intimidad la relacionamos con el sexo y existen algunos matices. En la pareja podemos hablar de dos tipos de intimidad: una sería más emocional y la otra más física.
Intimidad emocional
La intimidad emocional implica conocer a alguien de una forma muy sincera, desde su esencia y dejarle ser libremente. A partir de aquí, puedes decidir si es esta persona la que te va a acompañar en tu camino. Y no es exactamente encontrar tu media naranja sino encontrar a otra naranja entera que camine junto a ti. No es “lxs dos somos unx”. Esta idea es un caldo de cultivo de problemas y dependencia.
Cómo somos y cómo nos relacionamos en pareja

El vínculo primario
En esta intimidad salen esas cositas a tratar en terapia y que tienen su origen en el vínculo primario que se inició cuando eras bebé. A partir de éste, se va a desarrollar un apego seguro o inseguro que va a marcar la manera de relacionarte con el mundo, la vida, la muerte, tus amigxs, parejas, hijxs y con él/la más importante: TÚ MISMX.
La relación de pareja, una “relación horizontal”

Intimidad física
Sexo o sexo+intimidad
En la intimidad física encontramos el sexo. Puede haber solo sexo o sexo+intimidad que es lo que conocemos como “hacer el amor”.
Tanto si hay una intimidad (emocional) como si no, cuando practicamos sexo, también se están poniendo en juego nuestras heridas, seguridades, inseguridades, nuestros límites, vulnerabilidades, etc. De hecho, el sexo lo podemos utilizar de muchas formas y la manera de practicarlo, las dificultades que se presentan, etc. puede hablarnos de nosotrxs mismxs.
Pareja, sexo, relaciones… como siempre, más ámbitos desde los que crecer y obtener información de nosotrxs mismxs.
Te mando un abrazo.
